martes, 24 de julio de 2007

Galletas de canela

Crónica de un viaje anunciado

Después de estos 15 días de ausencia empiezo, o eso espero, mis verdaderas vacaciones. Porque viajar es cansancio y agotamiento. Ver y más ver. Dormir lo justo.

Aprovecharé para ir poniendo (parte) de mi diario de viaje y así compartir con vosotros alguna de mis sensaciones y experiencias. Hoy empiezo con un breve comentario del vuelo a Moscú y mis primeros encuentros, nada más. Espero que no resulte pesado.


De paso

Ahora estoy de paso, mañana es muy probable que esté otra vez en la isla pero en lo que queda de julio espero poder compartir algunas de las recetas que me hayan resultado interesantes. Tengo la caja llena de ellas pero empezaré por unas sencillas galletas que he realizado esta misma mañana. Como sabéis, no puedo vivir sin postre.

Algún ingrediente puede resultar extraño, como el crémor (que no cremor) tártaro. Yo lo he conseguido sin ningún problema en la farmacia de la esquina, lo han pedido al laboratorio y en un par de horas ya lo tenían. Si no responden a “crémor tártaro”, puede pedirse como “Tartrato Ácido de Potasio” o “Potasio Bitartrato”. Fórmula química: C4 H5 K O6.

No os preocupéis si tenéis miedo de no volver a emplearlo. Hay infinidad de recetas de bizcochos o galletas que lo emplean y, sobre todo, suele utilizarse ½ cucharilla para que no se bajen las claras a punto de nieve.

Las galletas, aunque las fotos no digan mucho, crujientes y riquísimas. O a M se lo han parecido.

Miércoles, 11/07/2007. Volando voy.



Estamos volando en dirección Moscú, quedan muy pocos minutos para llegar al destino. Agotado es la palabra, han pasado más de 24 horas desde que partimos de Santiago. Santiago, Madrid, aeropuerto y tarjetas de embarque (sin facturar), hotel, metro y paseo por Madrid, agotados, vuelta al hotel, en pie a las 4:00, facturación destino Ámsterdam con KLM, controles y más controles, Ámsterdam-Moscú. Volamos.


Durante el vuelo he acabado el primer libro. Me ha dejado un poco transpuesto, el libro sobre todo. Al momento empezaré otro que espero sea más optimista y menos sobrecogedor.

Las experiencias de siempre. Gente amable (las menos) y gente en eterno enfado con quién se presente y, probablemente, consigo mismas. Mis encuentros con Madrid nunca han sido demasiado reparadores. Todavía no he encontrado aquello que puede ofrecerme o, tal vez, lo mejor es ofrecerle algo para que me venga devuelto de otro modo.

M ha dicho que quiere descansar, a ver cuanto dura. Guía de Moscú en mano poco tiempo tardará en animarse.
Ingredientes
  • 56 gr. de mantequilla reblandecida
  • 50 gr. de manteca (mejor que sea vegetal)
  • 150 gr. de azúcar (blanco grano)
  • 1 huevo
  • 5 ml de extracto de vainilla
  • 122 gr. de harina normal. Nota: tengo una receta -mejor- que emplea 192 gr., no quedan tan planas, la haré muy pronto.
  • ½ cucharilla de bicarbonato sódico (2-3 gr.)
  • 1 cucharilla de crémor tártaro (unos 4 gr.)
  • ¼ o algo menos de cucharilla de sal
Nota: en muchos casos, cuando el bicarbonato se combina con el crémor tártaro, puede obtenerse un efecto similar, que no idéntico, sustituyéndolos por levadura química (Royal), también llamados “polvos de hornear”,en este caso unas 2 cucharillas. Si se puede, mejor es emplear los dos productos, quedarán más crujientes.

Envolver antes de hornear

  • 2 cucharadas de azúcar
  • 2 cucharillas de canela molida
Preparación

(1) Precalentamos el horno a 200-205º C.

(2) Mezclamos la harina con el bicarbonato, el crémor y la sal.

(3) Batimos la mantequilla con la manteca, el azúcar (del primer grupo de ingredientes), el huevo y el extracto de vainilla, hasta que quede cremoso. Incorporamos la mezcla de la harina.

(4) Podemos dejar reposar la masa un poco (no lo he hecho) y formamos unas pequeñas bolas.

(5) Mezclamos el azúcar (del segundo grupo de ingredientes) con la canela y rebozamos las bolas.

(6) Ponemos en una bandeja con papel de hornear separadas suficientemente, debe tenerse en cuenta que quedarán casi planas.

(7) Horneamos durante unos 8 ó 10 minutos, hasta que empiecen a tostarse, aunque no demasiado. Retiramos, dejamos enfriar un poco y guardamos.

Son unas galletas muy crujientes y, como en todos estos casos, se endurecen al enfriar. A M le han chiflado, además, la canela es afrodisíaca, quién lo diría…

Besos y gracias por la compañía.

4 comentarios:

Cogollos de Agua dijo...

¡Bienvenido!, te he hechado mucho de menos, estaba deseando que volvieras, y lo has hecho con esas super galletas que tienen una pinta espectacular.
Que bien, que fotos más bonitas, anda cuéntanos cositas, que has comido y sobre todo si te lo has pasado bien.
A mí en vacaciones me ocurre un poco como a M quiero verlo todo y descansar poquito que hay que aprovechar el tiempo, bueno pues lo dicho espero que os lo hayáis pasado de escándalo en estas primeras vacaciones.
Por cierto mañana intento conseguir el crémor, veremos a ver si en mi farmacia.....

Anónimo dijo...

Hola Harry
Aunque nunca escriba, soy asidua (todos los dias los primero que hago al entrar a internet) es mirar tu pagina porque me encantan tus recetas y tus fotos.
Bueno, que me tenias con un poco de mono jajaja. Espero qeu os lo pasarais genial de viaje.

Harry Haller dijo...

Gracias,
Yo sí que os echaba mucho de menos… Tanto que, aunque tengo que volver a hacer las maletas, necesito escribir y poner alguna receta.

A ver si de vez en cuando (hasta agosto) puedo aparecer…. para escribir y leer.

Besos y hasta pronto

Cogollos de Agua dijo...

Si, hazlo cuando puedas que hay un montón de gente (me consta, que amigas mías te vamos a hacer una club de fans....,sabes luego te referimos en nuestras conversaciones (sobre todo mi hermana y yo), mira ha dicho Harry que esto o lo otro, pero eso sí de forma muy íntima, nada de frivolidades, jejeje, ya te contaré, ya te contaré......

Publicar un comentario

Opina, pero con respeto para tod@s. Nadie es perfecto.