domingo, 30 de diciembre de 2007

Pastel de calabaza

Pastel de calabazaQue la vida no me sea indiferente…

Mayflower
Un típico postre USA de estas fechas. Es habitual del “Día de Acción de Gracias” y durante las Navidades. Por aquí no tenemos la tradición de la calabaza tan arraigada, por lo menos en Galicia, pues creo que en el levante español también son típicos los pasteles y tartas de calabaza.

Recuerda que siempre puedes acceder a ésta y otras recetas en el blog (http://www.pepinho.com).

Pastel de calabaza
He querido ser lo más riguroso y preciso que he podido con las especias, elemento característico de este postre. Son las encargadas de realzar el sabor de la calabaza, nunca deben camuflarlo, si así fuera no habríais puesto las cantidades correctas. Son típicas: la canela, el jengibre, la nuez moscada, la pimienta de Jamaica y/o el clavo. Incluso se venden preparados de “especias de pastel de calabaza” que las incluyen. Si lo hacemos con nuestras propias manos podremos “jugar” con nuestros gustos y apetencias. Ésa es la única dificultad, encontrar el punto preciso para obtener la combinación perfecta a nuestros gustos.

Con la canela no hay problema, siempre es el sabor que debe predominar y se tomará como referencia. Después viene el jengibre, aproximadamente la mitad, y por último, en menor cantidad, nuez moscada, pimienta de Jamaica (allspice) y/o clavo. Para no acabar por escribir la Biblia de las especias, sólo una recomendación personal: hay que tener mucho cuidado con la nuez moscada, un mal uso puede dar lugar a una tarta demasiado fuerte. Ante la duda prescíndase de la nuez moscada o sólo una pizca. En este caso: “mejor que falte que no que sobre”. Opinión personal.

Pastel de calabazaLlega a ser tan común el uso del puré de calabaza, tanto para tartas como para panes, que se puede comprar ya preparado y envasado en gran variedad de establecimientos. Yo lo he realizado al horno y, con lo que me ha sobrado, también he hecho un pan de calabaza con nueces. Ha quedado tanto o más rico que esta delicia de tarta. Ya lo pondré, aunque como el día de hoy ha sido triste las fotos hayan quedado a juego…

Pastel de calabaza… sólo le pido…

La última receta fue de Mercedes Sosa y tirando del hilo he llegado a esta canción. Es una canción llena de objetivos y ¿esperanzas? en el futuro, tristezas en el pasado. No es una canción religiosa, aunque lo parezca, tampoco una canción reivindicativa. Es una canción que despertará (espero) en cada uno de nosotros sentimientos muy dispares en la forma pero no en el fondo.

Mi ilusión y propósito para el 2008 (y hasta el infinito) es que el “futuro no nos sea indiferente”, ni el dolor, ni las guerras, ni la emigración…

Vamos a cantar todos juntos. Gracias… Sólo le pido…

Sólo le pido a Dios
que el dolor no me sea indiferente
que la reseca muerte no me encuentre
vacía y sola sin haber hecho lo suficiente.

Sólo le pido a Dios
que lo injusto no me sea indiferente
que no me abofeteen la otra mejilla
después que una garra me arañe la suerte.

Sólo le pido a Dios
que la guerra no me sea indiferente
es un monstruo grande y pisa fuerte
toda la pobre inocencia de la gente.

Sólo le pido a Dios
que el engaño no me sea indiferente
si un traidor puede más que unos uantos
que esos cuantos no lo olviden fácilmente.

Sólo le pido a Dios
que el futuro no me sea indiferente
desgraciado es el que tiene que marchar
para vivir una cultura diferente.

Sólo le pido a Dios
que la guerra no me sea indiferente
es un monstruo grande y pisa fuerte
toda la pobre inocencia de la gente.

Pastel de calabazaSólo estoy solo. De “Apocalypse Now “a Rosalía.

Saigon...shit. I'm only in Saigon. Every time, I think I'm gonna wake up back in the jungle.

Sigo en Santiago, solo, otra vez. Ya no sé qué es mejor.

When I was here, I wanted to be there. When I was there...all I could think of was getting back into the jungle.

Hoy la lluvia ha sido arte, “chove, chove, miudiño”. Corriendo por la alameda, entre los robles y el barro, cada gota es eterna, ni moja ni alumbra. Está.

Como chove miudiño,
como miudiño chove;
como chove miudiño
pola banda de Laíño,
pola banda de Lestrove

Soledad implica caos. He salido a correr a las dos y cuarto, la primera etapa era obligada, pasar al lado de la Catedral, después pensaría si ir en dirección Lavacolla, Grixoa, girar e ir hacia Luou… cualquier camino sería bueno, siempre intentando evitar las carreteras y pisando barro. Era de esos días en los que sería imperdonable perderme esta lluvia.

¡Como a triste branca nube
truba o sol que inquieto aluma,
cal o crube i o descrube,
pasa, torna, volve e sube,
enrisada branca pruma!

Giro de 180º, dirección oeste. Al pasar por la Alameda no pude evitar dar una vuelta, hojas caídas; dos vueltas, soledad, hora de la comida; tres vueltas, barro y niebla; cuatro vueltas, Valle Inclán; cinco vueltas, la mejor vista de La Catedral; seis vueltas, dos jóvenes con sus perros, en silencio; siete vueltas, turistas fotografían árboles y casas; ocho vueltas, pareja; nueve vueltas, campus sur; diez vueltas, una familia;…. n vueltas, Rosalía:

Nesta terra tal encanto
se respira... Triste ou probe,
rico ou farto de querbanto,
¡se encariña nela tanto
quen baixo o seu ceu se crobe!...

Pastel de calabaza
Acabé por pasar prácticamente las dos horas dando vueltas por a la Alameda. Dar giros suele resultar monótono pero esta vez he descubierto en cada vuelta algo nuevo : la Iglesia de Santa Susana, el reflejo de La Catedral en una fuente (pronto habrá fotografía), los patos del jardín, el palco/quiosco

Nota: como no he llevado la cámara ;-), las fotos de la Alameda son de “Santiago Turismo”. Ya tocará algún día.

Pastel de calabazaIngredientes
Para un molde de 22 cm de diámetro y cerca de unos 3,5 de alto (mínimo)
  • Una base de masa dulce o masa quebrada. Mi preferida es la masa dulce, que he usado.
  • 425 gr. de puré de calabaza.
  • 400 gr. de leche condensada.
  • 2 huevos grandes.
  • 1 cucharilla de canela molida.
  • ½ cucharilla de jengibre.
  • ¼ a ⅛ de cucharilla de nuez moscada (opcional)
  • ¼ a ⅛ de cucharilla de pimienta de Jamaica.
  • Una pizca de clavo molido (opcional)
  • ½ cucharilla de sal.
Pastel de calabazaPuré de calabaza

(1) Preparación del puré de calabaza. El puré de calabaza puede realizarse tanto mediante cocción (al vapor o en agua) como al horno. Personalmente prefiero hacerlo al horno, pues durante una cocción adquiere mucha agua, siendo necesario exprimirla y dejarla en reposo hasta que haya eliminado el exceso de líquido. Al horno, aunque también suelta agua, aunque en una cantidad mucho menor.

Cortamos la calabaza en trozos retirando las semillas, que podremos tostar para tomarlas como las famosas “pipas” de girasol, y las hebras que tiene en su interior. Los trozos no deben ser demasiado pequeños, si la calaba es pequeña la partiremos transversalmente por la mitad. La ponemos en una bandeja con la piel hacia abajo y horneamos entre unos 50 minutos a una hora y "pico" a 165º C, hasta que esté blandita. No debe tostarse ni quemarse, eso le daría un sabor indeseado, sólo debe cocerse lentamente hasta que la pulpa esté blanda y se deshaga relativamente fácil con un tenedor. Podemos taparla con papel de aluminio para que no se tueste.

Una vez cocida raspamos la piel, retiramos el relleno y hacemos puré, evitando que queden unas indeseables fibras y el puré sea homogéneo. Escurrimos el exceso de agua con un colador. Podemos dejarlo en un colador varias horas para que siga escurriendo. Reservamos hasta su utilización. Puede conservarse perfectamente en el congelador (o eso he leído alguna vez, no lo he probado)

(2) Preparamos la base de acuerdo con la receta de la masa dulce y la introducimos en el frigorífico hasta el momento de ser usada, un mínimo de dos horas.
Estiramos la masa con un rodillo y entre dos bolsas de congelación o película de cocina, cualquier otro elemento haría que se pegase. Forramos el molde de 22 cm de diámetro hasta una altura de unos 3,5 cm. Pinchamos la superficie para evitar que suba. No es necesario hacer ningún prehorneado de la masa, estará cociéndose casi una hora. Reservamos en el frigorífico o en lugar frío.

(3) Precalentamos el horno a unos 210º C, aproximadamente. En un cuenco grande o tartera mezclamos el puré de calabaza con la leche condensada, las especias y la sal. Esta mezcla, y durante todo el proceso, debe hacerse con suavidad para evitar que coja aire, se agriete y deforme. Añadimos los huevos con cuidado, uno a uno, sin añadir el siguiente hasta que el primero esté totalmente incorporado a la mezcla.

(4) Introducimos en el horno precalentado a unos 205-210º C durante un cuarto de hora, aproximadamente. Si vemos que se hincha demasiado bajaremos la temperatura. La idea es que la masa se ase y no quede cruda.
Pasados unos 15 minutos bajamos la temperatura hasta unos 170º C, aproximadamente, para que el relleno se haga de un modo homogéneo. Debe estar cociendo durante unos 40 minutos, justo hasta que veamos que está compacta (podemos pinchar con un cuchillo o brocheta para comprobar la cocción). Intentaremos no abrir el horno durante todo el tiempo de cocción para no bajar la temperatura de modo brusco y que quede la superficie perfectamente lisa.
Apagamos el horno y dejamos que baje la temperatura poco a poco. Se puede dejar el horno ligeramente entreabierto, poniendo una cuchara de palo para que no se cierre.

Dejamos que enfríe totalmente antes de degustar. Suele tomarse a temperatura ambiente con una nata fresca espesa o helado. A mí también me gusta fría y mejor uno o dos días después, los sabores se habrán repartido y consolidado.

Si os gusta la calabaza como a mí os encantará. Es una tarta diferente y, por ello, no para todo tipo de paladares, el sabor de las especias es sutil y nada recargado, el justo para realzar el sabor de la calabaza.

17 comentarios:

Anónimo dijo...

Hubo una vez una isla donde habitaban todas las emociones y todos los sentimientos humanos que existen. Convivían, por supuesto, el Tiempo, La Sabiduría, el Amor, la Angustia, la Envidia, el Odio... Todos estaban allí. A pesar de los roces naturales de la convivencia, la vida era sumamente tranquila y hasta previsible. A veces la Rutina hacía que el Aburrimiento se quedara dormido, o el Impulso armaba algún escándalo, pero muchas veces la Constancia y la Conveniencia lograban aquietar el Descontento.
Un día, inesperadamente para todos los habitantes de la isla, el Conocimiento llamó a reunión. Cuando la Distracción se dio por enterada y la Pereza llegó al lugar de encuentro, todos estuvieron presentes.
Entonces, el Conocimiento dijo:
-Tengo una mala noticia para darles: La isla se hunde.
Todas las emociones que vivían en la isla dijeron:
-¡No, cómo puede ser! ¡Si nosotros vivimos aquí desde siempre!
El Conocimiento repitió:
-La isla se hunde.
-¡Pero no puede ser! ¡Quizá estás equivocado!
-El Conocimiento casi nunca se equivoca -dijo la Conciencia dándose cuenta de la verdad-. Si él dice que se hunde, debe ser porque se hunde.
-¡Pero qué vamos a hacer ahora? -se preguntaron los demás.
Entonces, el Conocimiento contestó:
-Por supuesto, cada uno puede hacer lo que quiera, pero yo les sugiero que busquen la manera de dejar la isla... Construyan un barco, un bote, una balsa o algo que les permita irse, porque el que permanezca en la isla desaparecerá con ella.
-¡No podrías ayudarnos? - preguntaron todos, porque confiaban en su capacidad.
-No -dijo el Conocimiento-, la Previsión y yo hemos construido un avión y en cuanto termine de decirles esto volaremos hasta la isla más cercana.
Las emociones dijeron:
-¡No! ¡Pero no! ¡Qué será de nosotros?
Dicho esto, el Conocimiento se subió al avión con su socia y, llevando de polizón al Miedo, que como no es zonzo ya se había escondido en el motor, dejaron la isla.
Todas las emociones, en efecto, se dedicaron a construir un bote, un barco, un velero... Todas... salvo el Amor.
Porque el Amor estaba tan relacionado con cada cosa de la isla que dijo:
-Dejar esta isla... después de todo lo que viví aquí... ¡Cómo podría yo dejar este arbolito, por ejemplo?, Ahh... compartimos tantas cosas...
Y mientras las emociones se dedicaban a fabricar el medio para irse, el Amor se subió a cada árbol, olió cada rosa, se fue hasta la playa y revolcó en la arena como solía hacerlo en otros tiempos. Tocó cada piedra... y acarició cada rama...
Al llegar ala playa, exactamente desde donde el sol salía, su lugar favorito, quiso pensar con esa ingenuidad que tiene el amor:
"Quizá la isla se hunde por un ratito... y después resurja... ¡por qué no?"
Y se quedó durante días y días midiendo la altura de la marca para revisar si el proceso de hundimiento no era reversible...
La isla se hundía cada vez más...
Sin embargo, el Amor no podía pensar en construir, porque estaba tan dolorido que sólo era capaz de llorar y gemir por lo que perdería.
Se le ocurrió entonces que la isla era muy grande, y que aún cuando se hundiera un poco, siempre él podría refugiarse en la zona más alta...
Cualquier cosa era mejor que tener que irse. Una pequeña renuncia nunca había sido un problema para él.
Así que, una vez más, tocó las piedritas de la orilla... y se arrastró por la arena... y otra vez se mojó los pies en la pequeña playa que otrora fue enorme...
Luego, sin darse cuenta demasiado de su renuncia, caminó hacia la parte norte de la isla, que si bien no era la qué más le gustaba, era la más elevada...
Y la isla se hundía cada día un poco más...
Y el amor se refugiaba cada día en un espacio más pequeño...
-Después de tantas cosas que pasamos juntos... -le reprochó a la isla.
Hasta que, finalmente, sólo quedó una minúscula porción de suelo firme; el resto había sido tapado completamente por el agua.
Recién en ese momento el Amor se dio cuenta de que la isla se estaba hundiendo de verdad. Comprendió que, si no dejaba la isla, el amor desaparecería para siempre de la faz de la Tierra...
Caminando entre senderos anegados y saltando enormes charcos de agua, el Amor se dirigió a la bahía.
Ya no había posibilidades de construirse una salida como la de todos; había perdido demasiado tiempo en negar lo que perdía y en llorar lo que desaparecía poco a poco ante sus ojos.
Desde allí podría ver pasar a sus compañeros en las embarcaciones. Tenía la esperanza de explicar su situación y de que alguno de sus compañeros lo comprendiera y lo llevara.
Buscando con los ojos en el mar, vio venir el barco de la Riqueza y le hizo señas. La Riqueza se acercó un poquito a la bahía.
-Riqueza, tú que tienes un barco tan grande, ¿no me llevarías hasta la isla vecina?
Yo sufría tanto la desaparición de esta isla que no pude fabricarme un bote...
Y la Riqueza le contestó:
-Estoy tan cargada de dinero, de joyas y de piedras preciosas, que no tengo lugar para ti, lo siento... -y siguió su camino sin mirar atrás.
El Amor se quedó mirando, y vio venir a la Vanidad en un barco hermoso, lleno de adornos, caireles, mármoles y florcitas de todos los colores. Llamaba muchísimo la atención.
El amor se estiró un poco y gritó:
-¡Vanidad... Vanidad... llévame contigo!
La Vanidad miró al Amor y le dijo:
-Me encantaría llevarte, pero... ¡tienes un aspecto!... ¡estás tan desagradable... tan sucio y tan desaliñado!... Perdón, pero creo que afearías mi barco -y se fue.
Y así, el Amor pidió ayuda a cada una de las emociones. A la Constancia, a la Sensualidad, a los Celos, a la Indignación y hasta al Odio. Y cuando pensó que ya nadie más pasaría, vio acercarse un barco muy pequeño, el último, el de la Tristeza.

-Tristeza, hermana -le dijo-, tú que me conoces tanto, tú no me abandonarás aquí, eres tan sensible como yo... ¡Me llevarás contigo?
Y la Tristeza le contestó.
- Yo te llevaría, te lo aseguro, pero estoy taaaaaaan triste... que prefiero estar sola -y sin decir más, se alejó.
Y el Amor, pobrecito, se dio cuenta de que por haberse quedado ligado a esas cosas que tanto amaba, la isla iba a hundirse en el mar hasta desaparecer.
Entonces se sentó en el último pedacito que quedaba de su isla a esperar el final...
De pronto, el Amor escuchó que alguien chistaba:
-Chst-chst-chst...
Era un desconocido viejito que le hacía señas desde un bote de remos. El Amor se sorprendió:
-¿A mi? -preguntó, llevándose una mano al pecho.
-Sí, sí -dijo el viejito-, a ti. Ven conmigo, súbete a mi bote y rema conmigo, yo te salvo.
El amor lo miró y quiso explicar:
-Lo que pasó fue que yo me quedé...
-Yo entiendo -dijo el viejito sin dejarlo terminar la frase-, sube.
El Amor subió al bote y juntos empezaron a remar para alejarse de la isla.
No pasó mucho tiempo antes de ver cómo el último centímetro que quedaba a flote terminó de hundirse y la isla desaparecía para siempre.
-Nunca volverá a existir una isla como ésta -murmuró el Amor, quizá esperando que el viejito lo contradijera y le diera alguna esperanza.
-No -dijo el viejo-como ésta, nunca.
Cuando llegaron a la isla vecina, el Amor comprendió que seguía vivo.
Se dio cuenta de que iba a seguir existiendo.
Giró sobre sus pies para agradecerle al viejito, pero éste, sin decir una palabra, se había marchado tan misteriosamente como había aparecido.
Entonces, el Amor, muy intrigado, fue en busca de la Sabiduría para preguntarle:
-¿Cómo puede ser? Yo no lo conozco y él me salvó... Todos los demás no comprendían que me hubiera quedado sin embarcación, pero él me ayudó, él me salvó y yo ni siquiera sé quién es...
La Sabiduría lo miró a los ojos largamente y dijo...
-Él es el único que siempre es capaz de conseguir que el amor sobreviva cuando el dolor de una pérdida le hace creer que es imposible seguir. El único capaz de darle una nueva oportunidad al amor cuando parece extinguirse. El que te salvó, Amor, es el Tiempo.

Liliana Fuchs dijo...

Buenísima pinta, me encanta el color naranja de la calabaza, y su sabor claro! Yo hice una por Halloween muy parecida, usando leche evaporada en lugar de condensada. Qué rica, con todas esas especias...

Saludos!

Anónimo dijo...

¿Qué podemos desear para el próximo año?
Que las VERDADERAS AMISTADES continúen eternas y tengan siempre un lugar especial en nuestros corazones.
Que las lágrimas sean pocas,y compartidas.
Que las alegrías estén siempre presentes y sean festejadas por tod@s.
Que el CARIÑO esté presente en un simple hola,o en cualquier otra frase...
Que los CORAZONES estén
siempreabiertos para nuevas amistades...
Que el AMOR por el prójimo sea nuestra meta absoluta.
Que las cosas pequeñas como la envidia,el odio...sean"observadas"y"paradas"en el momento de su nacimiento.
Que aquel que necesite ayuda,encuentre siempre en nosotros la reconfortante palabra amiga.
Que este,nuestro pequeño MUNDO sea cada vez más humano.
Que todo lo que SOÑAMOS,IMAGINAMOS E INTUIMOS, se transformen en "realidades".
Que el PERDÓN y la compasión superen siempre las amarguras y las desavenencias.
Que nuestra LARGA JORNADA de los próximos 365 días esté repleta de cosas buenas.
Que para el 2008 tod@s alcancemos,PAZ,FELICIDAD,ARMONÍA Y AMOR.
A tod@s OS DESEO UN FELIZ AÑO.
ISI

Anónimo dijo...

¡Pero que bonita fábula!!! quien quiera que seas. Es preciosa. Y acepta mi cumplido, porque conmoverme a mí con una fábula es difícil. Sólo me gustan los pasteles de comer. Ni en canción ni en papel, ni en cine. Pero me parecen unas palabras tan sabias...que aunque se repitan mil veces nunca será bastante. El mundo no se para nunca. Y mientras elegimos sufrir y quejarnos nos lo perdemos. Lo malo y lo bueno. Ya es malo es tener un problema, pero encima guardarle el luto solo prolonga la situación. Esta es mi opinión ahora, pero tardé años de autocompasión en llegar hasta aquí. ¡Como lamento ahora tanto tiempo revolcándome en mis propias miserias, llena de orgullo dramático! Pido para todos, que si no se pueden acabar los problemas, al menos estemos llenos de una enorme fuerza que nos ayude a enfrentarlos. Muy Feliz Año a todos/as.

Harry Haller dijo...

Supongo que quién ha puesto el relato ha sido esa persona que me lo hizo llegar hace tiempo. Gracias de nuevo, como aquel día. El tiempo…

Sé que hay recetas de esta tarta con leche evaporada, leche o nata pero por algún comentario que he podido leer de varias fuentes “se comenta” que se obtienen mejores resultados con leche condensada. Si se usa leche evaporada, leche o nata hay que añadirle azúcar, por supuesto. Yo no lo he probado, supongo que será para gustos y texturas. En eso no me meto… Mil gracias.

Gracias ISI, me uno a esos deseos…

¿Pasteles? La frontera que une un pastel de algo salado es muy fina ;-) A mí sí que me gustan los pasteles en “pintura” y (los bien llevados) en el cine.
Te haré caso y no me bañaré en tus miserias, lo haré con las mías ;-). Bromas aparte, el hilo que separa el sensacionalismo, “revolcarse” en los propios problemas o hacer teatro dependen más del observador que del protagonista. Para unos risas, para otros penas, para otros cuento, para otros nada. SÓLO VALE LA SINCERIDAD CON UNO MISMO, después que cada uno lo vea tal y como desee o, mejor dicho, sea. ("Vemos la cosas cómo somos nosotros, no cómo son.")

FELIZ AÑO NUEVO

Anónimo dijo...

Pero Pepinho,¿hacerme caso? y ¿quien soy yo?, yo no te aconsejaba nada. Solo me vi reflejada en una bonita historia y me apeteció compartirlo. Mis miserias eran ridículas para mí(ahora lo veo así), cuanto más para dárselas al prójimo como baño. Tampoco he hablado de sensacionalismo,ni de teatros.. solo que vivia en mi pena, sin ocuparme de más. Pero hablaba DE MI.¿Te has sentido atacado? Me parece que sí y lo lamento, aunque creo que no había por qué. En cualquier caso, con la tarta me has dado gran alegría, porque me gusta mucho la calabaza roja, pero no manejo demasiadas recetas. Buñuelos y poco más. Besos y abrazos para todos. Y mucha felicidad en cualquier formato.

Anónimo dijo...

Isabel "la Otra", por si lees esto: He intentado entrar en la página WEB que sale al final de tus intervenciones (sopasyletras.com)y no he podido. Me había entrado la curiosidad de ver de que iba.. ¿Es tuya? ¿Es que está en obras o es es de acceso restringido? Digo para seguirlo intentando o no. Es que caen muy bien tus comentarios, ¡me estoy haciendo fan yo también!

Anónimo dijo...

Hola Harry Haller ¿de veras estás pensando cerrar el blog porque crees que la gente cotillea lo que escribes? Antes parecía gustarte que hubiera intervenciones y se suscitase debate sobre lo que escribías. Es más, creo que parecías propiciarlo. Y no se te veía tan susceptible. ¿No sientes el cariño en los comentarios? Perdona mi atrevimiento si te parece mal, pero, ¿como saber donde están los límites? ¿quieres que se hable solo de las recetas? En ese caso tal vez baste sólo con decirlo.

Harry Haller dijo...

¡FELIZ AÑO NUEVO!

¡Qué mal me explico!
Perdón. ¿Y quién soy yo? No me he sentido atacado en nada. Por un segundo he estado bien de ánimo, por lo menos exteriormente y ni un solo momento vi en tu comentario nada ofensivo. ¡Ni de lejos!. A veces soy un poco irónico y mordaz (¿sarcástico?). Aproveché tu comentario para meterme contigo, sólo eso. Era una broma, ¿por qué sino hablar de “pintura pastel”…?

Perdona y felicidad en PDF ;-)

Anónimo,
Sigo sin explicarme nada bien. La gente no cotillea lo que escribo, opina sobre lo que escribo y eso crea, a veces, debate y ¡me encanta! Si el blog fuese monocromo sería “un mundo feliz” e insípido.

Si he pensado en cerrar el blog era por mí. Porque no tengo todo el tiempo que quisiera (soy un perfeccionista) y no me gusta dejar las cosas a medias. Porque, tal vez por mi estado de ánimo, siento que últimamente aburro a las piedras y me repito, y repito, porque ahora estoy con el ánimo muy bajo y sólo pienso en una cosa. Porque durante un tiempo me desahogó pero empiezo a rozar la autocensura para no ofender a nadie, empezando por M. Porque, aun siendo público, tiene cierto estatus de anonimato que se ha ido disipando día a día (“el mundo es un pañuelo” y, ya sabes, lo que no deseo es ofender a quién quiero y protagoniza parte de mis vivencias). Porque no quiero que “pensar” me separe de “actuar” y esté quejándome en vez de levantar el culo de mi asiento y moverme para “arreglar las cosas”. Porque ésta es sólo una parte (pequeña) de mi vida, una vida que desea ocuparse de muchas cosas. Desde los despachos no se arregla el mundo, sólo se discute cómo arreglarlo. Porque quiero ir a clase de música, y de pintura, y seguir estudiando (más y más),…

¿Por qué sigo con él? Porque después de tantos comentarios, disputas, apoyos,… sería como perder a un amigo. A much@s amig@s.

Feliz año nuevo

Anónimo dijo...

OKI: gracias por tus palabras. No se que problema tendrás para entrar en la web porque está funcionando. Acabo de ver (¡no me había dado cuenta!), de que Pepiño me ha puesto entre sus enlaces (gracias¡¡¡¡¡), he entrado y sin problemas.
De todas formas te diré que mi espacio es muy pobre al lado de este. Mis recetas son muy normales y las fotos dejan mucho que desear. Hablo de literatura, que es mi gran pasión, pero los libros que yo leo son muy raritos....
La combinación que ha hecho Pepiño de gastronomía+sentimisntos (propios) es única e inimitable. Poca gente en mi vida he visto "desnudarse" así en público de forma creible y te diré que tiene doble mérito: para la persona que lo hace y para la que lo lee.
Con las historias de Pepiño he revivido muchas de mis angustias, situaciones y pensamientos de antaño y me ha hecho pensar y recapacitar e, incluso, modificar algunos de mis comportamientos actuales.
Es cierto que a veces me he sentido irritada por sus palabras, y se ha debido traslucir en las mías, pero porque me daban ganas de bajarle los pantalones y darle un cachete o decirle ¡levántate y anda, coño!.
Pero esto también me hecho recordar que nadie es nadie para decirle a nadie lo que tiene que hacer, que la mayoría de las veces SABEMOS, pero no queremos o podemos y que simplemente el desahogarse y que alguien escuche y "parezca" que te comprende es suficiente. Es como ir al psicólogo: si este es bueno nunca te dirá lo que debes hacer, te conducirá de tal forma que tu te des cuenta y lo hagas solito, si te da la gana, claro.
Por último añadiré, es que me apetece, que yo no creo en las personas. En el sentido de que me he esforzado toda mi vida en tratar de ser "feliz" por mí misma, nunca dependiendo del afecto de los demás. No necesito la aprobación de los demás y su opinión, en general, me importa un pimiento.Esto me ha dado "fama" de persona fría (mi propia madre me lo decía), pero quien entienda esto sabrá la niñez que he tenido y la coraza que debe ponerse uno para sobrevivir. Por eso, porque he procurado no vivir de sentimientos ajenos, llevo tiempo gozando de una cierta tranquilidad-felicidad y lo que he conseguido es no tener muchas personas a mi lado pero las que tengo, por lo menos, no me hacen "de sufrir", como diría algún personaje de Almodóvar.
Y sin embargo lo anterior, me interesan mucho las personas y las escucho atentamente y leo entre líneas. Es la contradicción humana, supongo.

ISABEL - LA OTRA
www.sopasyletras.com/inicio

Anónimo dijo...

Uf Harry! Menos mal, me quedo tranquila.:). Si es señal de buen estado anímico, puedes meterte con mis comentarios cuanto quieras, je,je. Esto de la falta de entonación a veces genera confusión.
Gracias LA OTRA, a través del enlace he podido entrar. Y también me gusta tu blog. FELIZ AÑO PARA TODOS

Anónimo dijo...

Uf...tantos días sin pasar por aquí, buena señal para algunos pues eso significa que están ocupados haciendo cosas más interesantes. Año nuevo...no quiere decir "vida nueva"; la mayoría de nosotros opta por la continuidad.

Sólo darte las gracias, Harry, por el despertar de hacer postres en mi casa. Hace unos años tiré muchos utensilios de "esos" y mi autoregalo de Reyes están siendo unos moldes y ayer tres cajas distintas de virutas de xocolate y crocanti que estaban en el Ldl y el sirope del CI. Puede parecer una tonteria pero para mi, ke soy anticompras total, preferir esto a unos zapatos nuevos dice mucho.

Gracias y buen año 2008 que rima con-----> ..bizcocho!! :-)

Anónimo dijo...

Rosita digué... :·)))))
Hola, otra vez por aquí. Bueno, Pepinho, hay que ver como te atribulas con los halagos, no me regañes ni te asustes, hombre, que no soy una 'fan fatale'( mujer que si no consigue el autógrafo del ídolo se convierte en maníaca homicida):·)))))).pero, todo y tu rol de antihéroe (estoy acostumbrada a entenderlos gracias a mis ídolos Calimero y sobre todo Carlitos), yo sigo en mis trece y no te pienso bajar del podio. Las recetas de los dominicales o revistas no están tan bien explicadas y me han provocado muchos viajes a la basura. Y tus mantecados los he hecho tres veces estos días!!!!
Sobre las películas navideñas, yo solo vi una: Plácido. Me lo pasé en grande!!! Sobre la supuesta caridad navideña de ricos a pobres, y sin moralina. Muy Berlanga. Por cierto, ya tengo Un mundo de fantasía! Viva Willy Wonka... Y sobre todo mi hermanito, que me la ha grabado. Ya volveré, de mientras, besitos.

Harry Haller dijo...

Tan poco tiempo y tantas cosas que decir.

Sólo unos comentarios. La falsa modestia es peor que ser presuntuoso, se es por partida doble. Os puedo asegurar que no es una falsa modestia, por eso escapo muchas veces de los comentarios halagadores y, aunque los agradezco, no me atrevo a responder.

Hace mucho que no tiro nada, no es presunción, es certeza. No recuerdo el último fracaso culinario y intuyo que es porque creo haber aprendido a buscar caminos alternativos cuándo las cosas no van bien del todo (una buena cobertura lo camufla todo ;-)).

¡Ya lo recuerdo!, el último error de medida fue con la tarta de chocolate blanco y queso, quedó muy rica pero la cantidad de gelatina fue escasa, se desmoronaba con mucha facilidad. Pues eso, me tomé una riquísima mousse de chocolate blanco y queso en ramequin ;-)

Besos a tod@s.
Mi paso es muy fugaz…

Llaesha dijo...

Hola

Simplemente una pregunta de la receta, el relleno de calabaza no lleva harina?
Gracias

Pepinho dijo...

Aunque mi memoria no tiene tanto recorrido... Sí recuerdo que esta receta no la lleva, hay que tener en cuenta que lleva 2 huevos, leche condensada y, sobre todo, puré de calabaza. Su densidad es la de un pudin, nada abizcochada.

Espero haber ayudado.

Un abrazo.

estela dijo...

La he hecho hoy y está muy rica, muchas gracias ;)

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