martes, 18 de noviembre de 2008

Chipirones rellenos en salsa

Chipirones rellenos en salsa
Chipirones rellenos en salsaFantasías animadas de ayer y hoy presentan…

Animales intrépidos
Es tarde y no he tenido una buena semana hasta ahora. No ha sido casualidad la larga espera desde la última receta. Me imagino que aquellos que esperan un postre de presentación llamativa se llevarán (otra) pequeña desilusión. He hecho algunos dulces que creo muy interesantes estos pasados días, también suficientemente largos como para que la explicación me lleve más tiempo del debido y disponible en estos casos.


Chipirones rellenos en salsaDe igual forma espero que esos mismos que esperaban un postre puedan abrir un poco los ojos ante otro clásico de nuestra cocina: unos chipirones rellenos en salsa de tomate. Pero ojo, no todo es tan sencillo o trivial como parece. Hay un par de pequeños detalles que le dan el acompañamiento necesario a una salsa de tomate (que podría ser casera): el orégano y el laurel, dando por supuesto que en vuestras versiones le pondréis vino. Ese pequeño detalle es un gran detalle cuando se habla de un plato del mar. Probadlo y veréis.

Chipirones rellenos en salsa
1001 razones para ser vegetariano
Una. Hace bastante tiempo que no lo paso tan mal durante la preparación de un plato, no éste. Ayer domingo tuve que cometer un asesinato de los que no tienen perdón. María había comprado un bogavante el viernes, vivito y coleando (nunca mejor dicho). Mi esperanza (seré malo) era que ayer no hubiese sobrevivido y que cuando tuviese que hacerle las incisiones necesarias en estos casos, el crustáceo ya estuviese totalmente muerto. María retiró la bolsa del bogavante de la nevera. La bolsa tenía vida propia, si la hubiese dejado en cinco minutos más habría salido por la puerta. Se fue y me dejó allí solo con una bolsa cerrada, un animal vivo, una tabla grande y un enorme cuchillo de agudo filo.

Chipirones rellenos en salsaPensé que lo mejor sería empezar cortando longitudinalmente la cabeza, desde el vértice hasta el tórax. Clavé la punta del cuchillo con fuerza, esperando que muriese en ese mismo instante. Pero no, encogió el abdomen hasta golpear mi mano, hasta me pareció oír su lamento en ese instante. Cerré los ojos. Actué rápido y su abdomen se encogía con más fuerza cuanto más penetraba el cuchillo en su cabeza. Me sentí muy mal, debía actuar todavía más rápidamente. Lo corté longitudinalmente, intentando pensar en otra cosa, pero cada fragmento tenía vida propia. Las terminaciones nerviosas hacían que este pequeño Frankenstein cobrase vida. Por una parte las antenas, por otra las patas y hasta una sustancia verdosa que se repartía por la tabla parecía latir.

Lo cociné y fui incapaz de tomarme un solo bocado. María, que no estaba presente durante el asesinato, se chupó los dedos. Reservé la cabeza para que hoy formase parte de una fideuá. Tampoco la probé, hoy sólo he comido postre y fruta.

Chipirones rellenos en salsaIngredientes
Relleno
  • ½ cebolla
  • 1 trocito de pimiento verde
  • Un puñado de chipirones
  • 1 huevo cocido
  • Unas gambas (opcional)
  • 1 diente de ajo (majado)
Salsa
  • 1 cebolla cortada en juliana fina (tiras muy finas)
  • 1 ó 2 hojas de laurel.
  • ½ vaso de vino blanco.
  • 1 diente de ajo majado.
  • Un poco de orégano.
  • 300-400 gr. de salsa de tomate.
Chipirones rellenos en salsa(1) Cocemos el huevo hasta que esté hecho, 10-12 minutos. Limpiamos los chipirones, de forma que queden las cabezas (los tentáculos) y el cuerpo enteros. Los secamos bien con un paño, los salamos un poco y los pasamos por algo de harina. En una sartén echamos un poco de aceite de oliva y lo calentamos a fuego vivo. Cuando el aceite esté caliente freímos los chipirones, vertiéndolos uno a uno para que no baje la temperatura repentinamente y se frían bien, no se cuezan.
Los freímos unos minutos, hacemos lo mismo con los tentáculos y los reservamos. Si usamos unas gambas o langostinos los salteamos ahora. En ese mismo aceite añadimos un diente de ajo majado, la cebolla troceada fina y un trocito de pimiento verde. Bajamos el fuego y pochamos a fuego medio-bajo. Cuando la cebolla esté blanquecina añadimos las cabezas, el huevo y las gambas/langostinos troceados. Removemos y retiramos del fuego.

Chipirones rellenos en salsa
(2) Rellenamos los chipirones con cuidado, cerrándolos con un palillo para que no se salga el relleno. Los reservamos.
La preparación del sofrito de la salsa puede simultanearse con la preparación del relleno. Cortamos la cebolla en juliana fina (tiras delgadas) y la echamos en una olla con un poco de aceite de oliva virgen extra. Añadimos el laurel y un diente de ajo majado. La doramos a fuego bajo hasta que quede transparente. Cuando haya quedado tranparente retiramos el ajo, subimos la intensidad del fuego y añadimos el vino blanco. Dejamos que se reduzca un poco y espolvoreamos con un poco de orégano fresco (preferiblemente). Vertemos la salsa de tomate, bajamos el fuego e introducimos los chipirones rellenos, uno a uno y con cuidado.
Cocinamos a fuego medio-bajo hasta que estén hechos, entre 20 minutos y media hora. Servimos acompañados de unas patatas fritas o arroz en blanco, por ejemplo. La salsa es obligatorio mojarla en pan ;-)

Chipirones rellenos en salsa
Chipirones rellenos en salsa

14 comentarios:

Gloria Baker dijo...

Segùn el diccionario los chipirones son primos hermanos de los calamares, entonces me encanta porque me gustan los calamares, los empezè a comer hace años con un español loco pero que era un encanto, profesor de matemàticas y hacìa una de las paellas màs ricas que he probado.
Ahora respecto a lo acontecido al bogavante te entiendo perfectamente soy incapaz de matar cualquier cosa, pobrecito mi niño antes de terminar de leer pensè que no habìas podido comer.
A veces entiendo a los vegetarianos.
Nunca he podido hacer conejo por ejemplo, la Espe casi se muriò cuando supo que he comido conejo y que la gente los caza para comerlos aquì en la zona hay muchos.
Bueno te deseo que estès bien y estos chipirones se ven exquisitos.
El Sàbado hice tù receta de torta de espinacas, quedò muy rica, gracias.
Cariños y besooss Gloria

Tessera dijo...

Tu relato es más espeluznante que la versión remasterizada de "La niña del exorcista" Casi vomito, siempre siento esa sensación en el estómago cuando tengo ganas de llorar. Yo no hubiera sido capaz. A mi me sueltan un bogavante vivo y seguro que lo tengo aquí sentado (dentro de una pecera, claro) en el sofá de mi estudio donde están mis perros. Es un problema muy serio el mio con los animales.
Mi madre lo pasó fatal (creo que ya lo he comentado) para alimentarme en la infancia. Me negaba a comer cualquier cosa que tuviese cara.
No soy vegetariana pero me falta poco y tú me has ayudado a dar un paso hacia adelante con tu relato :)
¡Gracias Sr. Hitchcock! :-)

Harry Haller dijo...

Perdonad lo del bogavante, pero así lo he vivido. Cada trocito tenía vida propia...
Siento haberos estropeado el (rico, para mí) plato.

Besos.
Tengo que dormir.
Hasta mañana....

Berta dijo...

Ayyyyy visto así pues mejor comer con el corazón cerrado.
Siento el momento. Toda una prueba de amor. Yo que ni puedo con una simple arañita....

Nunca le he puesto orégano al sofrito. Sí a la salsa de tomate. Pero en un guiso de calamar el laurel sí, pero el orégano. ¿Cómo se mezclan los sabores?¿quien puede más el laurel o el machacado?

Muac

Anónimo dijo...

Los chipirones rellenos, es una de mis recetas preferidas, sin embargo de las que preparo muy de tarde en tarde, por el trabajo que conlleva, limpiar chipirones, hacer relleno, etc..., y luego te los comes en un visto y no visto. No le añado laurel ni oregano, la proxima vez, tendré que probarlo. Los tuyos se ven deliciosos.
Me parecía leer un relato o ver una película de terror en tu descripción del bogavante, vaya apuro, yo no me hubiera atrevido.

Besos.

Harry Haller dijo...

Muy rapidito, que ando muy mal de tiempo. Sólo para incrédulos:

Mejillones en salsa

Echadle un pequeño vistazo. Las diferencias son la harina (no es necesaria en este caso), la cantidad de orégano y el diente de ajo. ,-)

Besos y gracias.

olga 73 dijo...

Cómo te entiendo Pepinho!
Tenemos mucha confianza en una marisquería de aquí y la dueña siempre se empeña en darme el marisco vivito. Menos mal que compro poco pq a mí no me mata demasiado, pero el último bogavante lo mató V. Vaya si lo mató. El arroz quedó riquísimo, pero el mal rato me negué a pasarlo yo.
Primero lo coció, convencido de que así sufriría menos.
Bueno, me voy para casa ya. Tomo nota de la receta para esta semana. Gracias por poner algo saladito. Besos. OLGA.
pd.: que me acuerdo de todas, eh?
Besos Paulova, Tessera, Gloria, Karme, Berta, etc, etc. Es sólo falta de tiempo,que de eso P sabe un rato. Tengo 3 semanas, 3 libros por leer, 3 trabajos por presentar, 2 niños,un perro,....... No me quejo, pero tengo que sacrificar algo y a veces dejo la cocina. Qué remedio! Cuidaros. OLGA.

Delia dijo...

Gracias a Dios que por mis pagos podemos comprarlos hasta destripados, solo te queda el "tubo" listo para rellenar, y aparte te venden tambien los tentaculos (hablo de los calamares porque nunca compre chipirones) Creo que no podría matar ningun bicho ni bajo amenaza de muerte.
Muy buena tu receta Pepe...otra mas para agendar
besos

Anónimo dijo...

Vaya! Me encanta por lo sencilla que es. Trabajosa, pero sencilla :)

Gracias por el plato salado, yo no me he llevado decepción alguna, sino una muy grata sorpresa...

Muchos besos Pepinho.

Anónimo dijo...

La de antes era yo...

Anónimo dijo...

He probado tu receta. La verdad es que salen de lujo.¡ Riquisimos!
Me encanta tu web y lo que publicas. Gracias por compartir recetas geniales.

Anónimo dijo...

Gracias

cocinandoconfilus dijo...

Estos chipirones rellenos en salsa ya forman parte de mi recetario.Están buenísimos. Gracias por compartir recetas de lujo como esta.

www.cocinandoconfilus.blogspot.com.es

Ana dijo...

Un par de preguntitas sobre esta receta. ¿qué cantidad se entiende por "un puñado de chipirones"? Y como para cuántas raciones o personas sale con estas cantidades?

Un Saludo

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